1. Poder responder con claridad y convicción a la pregunta ¿Si mi empresa desapareciera, qué perdería el mundo?
2. En base al propósito, definir o redefinir la misión, visión y valores de la empresa y definir una cultura empresarial constructiva, inspiradora y que involucra a todos.
3. Dinamizar el trabajo en equipo, para lograr su alineación con el propósito, la misión y visión, de manera que sus valores se evidencien en sus estrategias y acciones cotidianas.
4. Qué el propósito se convierta en la plataforma de una comunicación clara y efectiva.
5. Identificar fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades y definir un plan de acción para contrarrestar dichas amenazas, capitalizando oportunidades, maximizando fortalezas y minimizando riesgos.
6. Identificar la áreas de capacitación requeridas.
7. Maximizar el potencial de los equipos a través de procesos de coaching.
8. De ser necesario, obtener un plan de cambios para implementar.
9. Mayor eficiencia y productividad en la formas de trabajo.